Antes del ave Fénix, en el antiguo Egipcio, ya existía un ave sagrada asociada al renacimiento, la creación y la luz del sol: Bennu.
su nombre proviene del verbo egipcio Weben, que significa brillar. Es decir, el que surge por sí mismo, el que vuelve a nacer de la luz.
Cuando la enfermedad me obligó a detenerme, todo se volvió silencio. Sentí cómo una parte de mí se apagaba. Pero luego, de ese mismo fuego interior, comenzó algo nuevo.
y de ahí, de una etapa de oscuridad, nació esta luz: Bennu, el renacer hecho en aroma.
- De la oscuridad, surge la luz.
- Del dolor, un próposito,
- Del fuego, una nueva forma de vida.
Encender esta vela puede representar ese momento en que, como Bennu, uno se eleva, es más consciente, más fuerte y más lleno de sentido.
Renacer no es solo un aroma, sino una llama que invita a reconectar con el poder de transformarse, a recordar que incluso, en las etapas más difíciles, pueden dar origen a algo hermoso.
De ese proceso nació mica candles, y con ella, esta vela: Bennu.
Sus notas olfativas se entrelazan como ese viaje interior:
- El jazmín y el azafrán abren con una luz suave.
- El ámbar y la madera dan fuerzas y calidez.
- Y el fondo de cedro, resina y almizcle deja un rastro profundo, como la paz después de la tormenta.
Cada llama que enciende, estas velas llevan un poco de esa historia. Un recordatorio de que la vida se reinventa, que incluso en las cenizas hay belleza, y que la luz, cuando vuelve, brilla más consciente.
Gracias por encender algo más que una vela.
Cada renacer, lleva un pedacito de mi camino, y me alegra compartir esa luz contigo.
mica candles.